Tragacionistas

A los que comulgan con ruedas de molino y aceptan lo que hoy es blanco, mañana negro, y al siguiente día marrón con pintas, a los que creen y participan voluntariamente (entusiásticamente algunos) en un experimento en fase III, con unos productos mal llamados vacunas, que están aún sin aprobar y sólo tiene licencia provisional por emergencia, y cuyos efectos secundarios a corto plazo incluyen a veces muerte y lesiones graves de por vida, mientras que a medio y largo plazo se desconocen, a los que no se han leído el prospecto de lo que les inoculan, a los que no saben o les da igual que esas «vacunas» no sean prescritas por un médico, y nadie asuma responsabilidades de sus consecuencias, ni personal sanitario que las aplica, ni farmacéuticas fabricantes, ni gobierno que lanza las campañas.

A todos esos, digo, que están en su perfecto derecho de participar en ese experimento, sin embargo, no les llaman tragacionistas o algo parecido. Qué cosas.

CONTROL DE LA POBLACIÓN

Las élites globalistas, con el apoyo entusiasta de gobiernos, van dando pasos para vacunar a todo el mundo forzosamente. Ese interés por inocular, que va en contra de los derechos humanos y de un montón de leyes y decretos, resulta taaaaaaan sospechoso que las teorías de la conspiración van abriéndose paso.

Y es que, como decía Kurt Cobain, «Solo porque no seas un paranoico no quiere decir que no te estén persiguiendo».

No sé si van a reducir drásticamente la población mundial, o sustituir razas, como dicen algunos conspiranoicos.

ENFRENTAMIENTO DE LA POBLACIÓN

No sé si van a darnos pasaporte al otro barrio a muchos de nosotros, pero lo que sí sé con certeza es que han conseguido crear otro enfrentamiento más entre la población. Si no había suficiente con hombre-mujeres, blancos-negros, heteros-gays, cristianos-islamistas, etc. etc. también tenemos el de «negacionistas»-«tragacionistas». Divide et impera. Divide y vencerás. Son malvados, pero tontos, no.

NOTAS SOBRE EL DIBUJO

Cambiando totalmente de tema, el dibujo (original mío) está hecho siguiendo un estilo concreto. Me gusta imitar a los dibujantes de mi infancia, aquellos que leía en los tebeos cuando era niño. A veces dibujo como Raf, otros como Ibáñez, en ocasiones como Vázquez, también me gustan mucho Edgar, Carbó, Coll... un sinfín.

En este caso lo he hecho al estilo de Conti. Y me gusta darle el color viejo que tienen mis tebeos antiguos, vestir los personajes con la ropa de entonces, con sombrero, trajes antiguos… En fin, me distraigo y me olvido de las élites globalistas mientras dibujo.