La Unión Europeda (no es una errata) ha autorizado dos insectos -de momento- para consumo humano. Grillos y otros.
Con el rollo del apocalipsis climático, han decidido cambiar filetes por grillos. Dicen que será difícil convencer a la gente para que coma guarrerías de esas, pero no lo es tanto.
De una parte están los tontos útiles de siempre, esos que tanto le gustaban a Lenin, los que están conformes con todo. Y de otra parte ¿cómo sabes que la pizza que estás comiendo no está hecha con harina de grillos tostados?
Comerse una bolsa de gusanitos puede hacerse algo literal mientras ves una película. Hay gente dispuesta a ello. Pero otros no lo estamos. Ya, bien, sí, pero… ¿en el etiquetado van a poner si el helado, las rosquillas o los canelones llevan grillos triturados? ¿O simplemente van a poner que pueden llevar trazas de hemípteros o coleópteros?
Apuesto a que no lo dicen. Pero es que, si lo indican, con el nivelazo que tienen nuestros estudiantes, les importará un huevo de pato porque no sabrán lo que es.
De modo que, lamentándolo mucho, informo a mis lectores que van a comer grillos, cigarras y pulgones por un tubo.